Azucena Klett

 

La propuesta de investigación

Esta tesis tiene como objeto investigar las posibilidades de transformación de las instituciones artísticas y culturales, a partir del establecimiento de vínculos entre los proyectos de cultura de base ciudadana y estas mismas instituciones. Este proyecto parte desde de una posición situada, que intenta plantear una hipótesis desde la práctica profesional, y desde una coyuntura histórica específica, que inscribe esta pregunta en un espacio histórico y teórico más amplio. Por un lado, toma su punto de partida en el trabajo que desarrollo en una institución concreta, Intermediae, un laboratorio y espacio experimental de creación colectiva que, desde sus orígenes, ha hecho explícito el deseo de crear mecanismos de apertura del dispositivo institucional y ha planteado abiertamente una pregunta por su significado y función social como espacio cultural público. Por otro, se sitúa en relación con los hechos acontecidos alrededor y después del 15M, a la discusión social, política y cultural que se ha producido sobre la ciudad de Madrid y su espacio público, y al debate en torno a la denominada nueva institucionalidad. Este nuevo contexto ha posibilitado la reformulación de la cuestión sobre la función social de la cultura y del arte en la gobernanza urbana.

 

Este proyecto de investigación establece como una de sus hipótesis la pregunta de si los espacios institucionales de la cultura y el arte pueden servir como un campo de experimentación abierto a la ciudadanía, en el que producir otras formas de producción y de investigación cultural y social, y analizará qué nuevas herramientas y prácticas institucionales se están poniendo en marcha para hacer posible esta apertura. Para ello se partirá de algunas de las experiencias llevadas a cabo en Intermediae en relación con la ciudad a través de un modelo expandido de curadoría, que serán puestas en relación con otros casos de estudio. Con el fin de situar y valorar las prácticas concretas habidas en Intermediae y en su contexto, la tesis pretende construir un doble marco. Por un lado, elaborará una genealogía de los marcos teóricos que han definido la nueva institucionalidad y un relato del desarrollo de las políticas culturales en el tejido cultural español, y en especial en el madrileño, que permitan contextualizar y dimensionar estas experiencias. Por otro, realizará una cartografía de las formas institucionales que, en diálogo con prácticas ciudadanas y contextos autogestionados, podrían estar alumbrando nuevas formas de institucionalidad artística y cultural. Este doble abordaje pretende compensar los posibles problemas derivados tanto de la escasa distancia temporal con el objeto de estudio, que limita la perspectiva sobre los efectos, como de la cercanía a mi propia práctica, al relacionarse con un contexto más amplio. A partir de esta doble inscripción, y desde un punto de vista especulativo que aborda un futuro que está por venir, la tesis pretende hacer una contribución al momento presente sobre las posibilidades de redefinición de la relación entre la ciudadanía y las instituciones culturales.

 

Contexto general y antecedentes: un nuevo ecosistema cultural

El 15 de mayo de 2011 miles de personas tomaron las calles de Madrid hasta congregarse en la Puerta del Sol. Pocas horas después algunas de ellas tomarían la noche y la plaza, dando lugar a la Acampada Sol y encendiendo el movimiento 15M. El lema Dormíamos, despertamos ponía palabras a un momento que cambió nuestra manera de concebir la política y desbordó las ideas de lucha, activismo, ciudadanía o movimiento social. La crónica de los días que siguieron continúa siendo escrita. Todavía hoy es difícil describir ese momento con distancia crítica o pretender un análisis sólido de las preguntas que se abrieron y los procesos en los que seguimos inmersas. Sin embargo, entre ellos sí podríamos señalar la puesta en crisis del paradigma representacional en el ámbito político institucional y el surgimiento del movimiento municipalista. Ambos procesos han tenido una influencia directa en la búsqueda de nuevas formas de gestión institucional, una pregunta que también ha afectado a las instituciones culturales.

 

Ese mismo 15M se abrían las puertas del Campo de Cebada, un solar vacío en el barrio de La Latina, tras meses de asambleas y discusiones que habían seguido a la intervención artística “Isla ciudad” del colectivo Exytz, una intervención efímera que había formado parte de un polémico y controvertido festival de arte público, la Noche en Blanco, en septiembre de 2010. La noche del 15 de mayo las puertas de este vacío urbano de 5.500m2 se abrían de nuevo, materializando lo que, desde hace un tiempo, se viene denominando como un “prototipo de infraestructura pública abierta”[1]. El Campo de Cebada se convirtió en un lugar donde vecinos, arquitectos, artistas y empleados municipales, entre otros agentes, empezaron a intercambiar formas conocimiento, a la vez que construían su propia infraestructura y modelo de gestión, debatiendo en torno a las responsabilidades que estos procesos suponían. Dos años más tarde el Campo de Cebada recibiría el prestigioso premio Golden Nica a las comunidades digitales, otorgado por el Ars Electrónica Center de Linz, relacionando su modus operandi con la cultura libre.

 

El Campo de Cebada se situó junto a muchas otras iniciativas ciudadanas implicadas en la construcción activa de su entorno urbano que venían gestándose desde antes o que empezaron a gestarse en este mismo contexto. Además del Campo de Cebada, cabe destacar otras iniciativas anteriores, como la ocupación del solar en Doctor Fourquet, donde surgió el proyecto Esta es una plaza en 2008, o anteriormente el proyecto ¿Cómo imaginas tu plaza?, desarrollado por el Antimuseo en el año 2005. Junto a ellos cabe señalar el papel institucional desarrollado por la Casa Encendida a través de la edición taller de intervenciones urbanas en 2008 (durante el cual, y de la mano del colectivos Urbanaccion y Esterni, los participantes llevaron a cabo la intervención que daría lugar al proyecto Esta es una plaza)[2] o el vínculo que se estableció entre la Fundación de los Comunes y el Museo Reina Sofía en 2012, así como el desarrollo anterior de espacios autogestionados como el Patio Maravillas o el C.S.O. Tabacalera. Otras iniciativas encaminadas a la creación de redes se habían producido a través de la articulación de REAAC, red de espacios alternativos de arte contemporáneo de Madrid (2005), el surgimiento de AAIM, red de agentes artísticos independientes de Madrid (activa hasta el año 2011), o la Red Transibérica de espacios autogestionados, actualmente activa.

 

En este contexto, la arquitectura que sostuvo la Acampada Sol robusteció la posibilidad de abordar otra manera de entender las infraestructuras urbanas, que se replicaron desplegándose por el resto de la ciudad. Las asambleas se extendieron desde la Puerta del Sol hacia las calles, plazas y barrios de Madrid, generando nuevas maneras de imaginar la ciudad y los espacios de lo político. Las acampadas afectaron profundamente la fabricación de lo social, de las instituciones y la manera en la que concebimos la construcción del espacio público. Entre estas iniciativas destacan proyectos vecinales que han recuperado vacíos urbanos, edificios desocupados que se han transformado en centros sociales o espacios baldíos donde ahora crecen huertos urbanos[3]. Podríamos decir que estos lugares se han autoconstruido desde prácticas de mediación y aprendizaje absolutamente heterogéneas, donde se ha puesto en juego un gradiente variable de alianzas con la administración municipal tradicional y donde se han creado nuevas formas de infraestructura que sitúan la asamblea en el centro de su modus operandi. Aunque cabe señalar que se ha producido una multiplicación de casos en otras ciudades de la península[4], el punto de partida de esta investigación es esta ciudad en ebullición, donde se ha producido una explosión de proyectos de intervención directa en la ciudad, que además exploran formas distintas de relación con las instituciones[5].

 

Estas formas de organización han devuelto a la ciudad una pregunta por su dimensión legislativa y por tanto, por las condiciones de posibilidad que permiten, amparan o prohíben determinado tipo de proyectos culturales y de intervención ciudadana. Como ejemplo, podríamos señalar el debate en torno a nuevas figuras como la “custodia urbana”, elaborada desde el proyecto Esta es una Plaza y que permite pensar en cómo facilitar la gestión del espacio público, basándose en la gestión del procomún y según una lógica de corresponsabilidad social de los ciudadanos[6]. Asimismo, cabe destacar la gestación de la normativa municipal de huertos urbanos, promovida desde la Red de Huertos Urbanos, que facilita el establecimiento de un programa permacultural, que podría competir con la agenda cultural y medioambiental de cualquier programa político[7], o el espacio de trabajo ligado a la plataforma Citykitchen, desde donde se diseñan herramientas metodológicas y espacios de diálogo entre actores culturales sociales y administrativos, imaginando la configuración de instituciones híbridas para la gestión de la ciudad[8].

 

Este proyecto de investigación parte, por lo tanto, del nuevo ecosistema cultural que ha emergido en la ciudad, un ecosistema que trata de resistir la crisis económica y el cuestionamiento del sistema público y que atiende a una idea de interdependencia entre una heterogeneidad de agentes, prácticas, infraestructuras e instituciones. Estas formas de asociación (asambleas, colectivos, huertos, redes) desbordan los espacios de lo colectivo (ya sea estos una institución cultural, una escuela, un espacio gestionado por movimientos de base, etc.) y constituyen un entramado cultural vulnerable, acosado por la implantación de las políticas neoliberales, expuestos a la voluntad política de los gobiernos locales, bajo amenaza constante de desalojo, pendientes de formas cesión, y en busca nuevas políticas de cooperación y cuidado[9]. Esta vulnerabilidad, con todo, permite trabajar bajo la perspectiva de la interdependencia y permite cuestionar y repensar las categorías de conflicto, disenso y antagonismo, que hasta ahora hacían del espacio de la cultura un ámbito articulado en torno a una necesidad de distancia crítica y negociación permanente. Esta propuesta reclama un nuevo vocabulario para pensar y enunciar una nueva ecología urbana y cultural, que reta los espacios institucionales tradicionales y la organización jerárquica de las administraciones, preguntándose qué es lo público y cómo debe gestionarse, y situándose en busca de nuevas herramientas para la práctica de una nueva institucionalidad.

 

Contexto situado: Intermediae como caso de estudio

Intermediae, el centro público de arte del que soy co-responsable y en el que desarrollo mi práctica, fue concebida en torno al año 2005, aunque no fue hasta el año 2007 cuando empezó su actividad. Imaginado y proyectado como un espacio público, Intermediae abría sus puertas como un sitio en el que cualquiera, especialmente personas de su contexto cercano y vecinos, pudiera habitar. Esta propuesta entraba en contradicción manifiesta con la política de branding de ciudades (ciudad-marca) en la que se inscribía. Intermediae se situaba -y se sitúa- en Matadero y en el proyecto urbanístico Madrid Río, como parte de una política municipal que apuesta por convertir esta parte de la ciudad en un referente turístico y de renovación inmobiliaria. Esta circunstancia hizo que se enfrentara a un ecosistema cultural muy crítico con el proyecto[10]. A pesar de este contexto adverso, Intermediae se definía como un espacio de posibilidad y proponía trabajar a partir de una agenda abierta que pudiera ser ocupada por aquellas otras iniciativas culturales con las que compartía ecosistema. Intermediae proponía entender el espacio institucional como espacio público y situaba el espacio museístico como un medio, una herramienta. En un primer momento, este modo de trabajo no tuvo una acogida fácil en el contexto artístico, acostumbrado a una idea del comisariado y la programación fuertemente autoral. En palabras de Olga Fernández López: “Esta forma inusual de ocupar el espacio, más allá de la perspectiva del workshop para artistas y los procesos transdisciplinares, unida a la problemática del papel de Matadero en la ciudad, hacía difícil la comprensión del proyecto. La idea de generar un vacío institucional en el que las cosas pudieran ocurrir, provocaba también la visión de un «vacío curatorial»”[11].

 

Esta vacío curatorial, sin embargo, se ocupaba a través de una serie de herramientas y prácticas institucionales. Algunas palabras clave del discurso institucional, como transdisciplinaridad, mediación o transformación, fueron más fácilmente asimiladas o entendidas. Junto a ellas, la horizontalidad era un concepto por investigar, definir e interpretar con otros. Investigar la horizontalidad, generar dispositivos de mediación, apertura o negociación[12], solo puede hacerse desde un compromiso local y una concepción íntimamente ligada a al concepto de colaboración. A este respecto, para Intermediae, la noción de participación “no significa comisariar proyectos artísticos que involucraban a personas y mediación no significa disolver las fronteras, sino investigar formas de involucrar a los ciudadanos en los procesos de decisión y acción relacionados con el arte y la cultura”[13]. Desde este punto de vista, cabría hablar de co-producción de las infraestructuras visibles e invisibles de la institución.

 

Como señala Nora Landkammer, este proceso no está exento de contradicciones, sobre todo, si pensamos en el deseo de generar una colaboración horizontal desde una posición de poder. Sin embargo, esto no debe impedirnos trabajar constante y conscientemente para lograr relaciones horizontales[14]. Este deseo nos ha guiado llevándonos a una práctica de la horizontalidad entendida, a veces, de la manera más sencilla: a través de la apertura de procesos de diálogo o de la creación de espacios de trabajo abiertos donde discutir distribución de presupuestos o el sistema de toma de decisiones. Esta horizontalidad también ha significado explorar las posiciones de poder a través de la rotación de roles y al intercambio de posiciones como la del artista, el pensador, el productor, el mediador, donde se ha producido un saber compartido entre tres campos profesionales: la curadoría, la producción artística y la educación, con una perspectiva explícitamente feminista. A lo largo de estos años, y explorando estos principios, hemos mantenidos formas de diálogo constantes con entidades y asociaciones locales, comprometidas con una curadoría basada en una escucha activa y en marcos colaborativos de trabajo[15].

 

Como todos los agentes de la ciudad, en 2011 Intermediae se vio radicalmente atravesado por la política de la calle. Cuando hago memoria me recuerdo yendo del centro a la calle, de la calle a la asamblea, de la asamblea a la calle, de vuelta al centro y de vuelta a la asamblea, y así durante unos meses que se han convertido en años. El otoño de 2011 trajo el eslogan We are the 99%, que conectaba con nuestro Movimiento de los indignados y con la #Spanish Revolution[16]. El autodenominado 99% aludía a los porcentajes de concentración de la riqueza, un 1% de la población frente al otro 99%, haciendo patente la conexión entre la emergencia de los acampadas y una crisis económica sin precedentes. Quizá la crisis siempre había estado ahí, pero en 2008 había entrado oficialmente en nuestras vidas y en nuestras casas; en los hospitales, en las escuelas y también en los centros de arte.

 

2012 fue el año de un rescate económico que el gobierno nunca nombró como tal, aunque pasara a convertirse en una de las grandes figuras de la última década de nuestra historia. Entre 2012 y 2013 se materializaron las políticas de austeridad, austericidas según sus críticos, y en Intermediae, como institución cultural que forma parte de la estructura pública, sufrimos recortes presupuestarios que no habíamos podido imaginar. La crisis, junto con las acampadas, han abierto un nuevo ciclo político que, además de cambiar nuestra concepción de la economía y el trabajo, ha roto los consensos sociales y ha puesto en el centro las prácticas que sostienen la vida y apuestan por el derecho a la vivienda, la sanidad y la educación, públicas y de calidad, o el derecho a la ciudad. Los recortes afectaron a todo el ecosistema cultural, obligándonos a inventar nuevos espacios de encuentro y formas de trabajo, colaboración y negociación. Así, en el otoño de 2011 y en los sucesivos, con la lluvia y el frío, las asambleas fueron ocupando el centro de arte y el centro de arte se dejó ocupar por las asambleas.

 

En su trabajo de estos últimos años, Intermediae, como espacio experimental, ha evidenciado las posibilidades que podría albergar como infraestructura abierta a la ciudadanía y a una imaginación colectiva radical que pueda generar interferencias contra el tipo de políticas urbanas en las que se inscribe. En este contexto descrito, genera además un programa específico de acción e intervención directa en el espacio público de la ciudad, fuera de sus “muros”, un programa que pone a esta institución en red con el tipo de espacios descritos al inicio de este texto[17], desde una perspectiva distribuida y descentraliza de las prácticas y los recursos. Mi interés en analizar el caso de Intermediae parte de la idea de que, en un contexto local donde no ha habido muchos precedentes similares, puede considerarse radical abrir un espacio de trabajo que enfatice la co-responsabilidad en la definición del espacio público l y la construcción colectiva de la institución. En este sentido, Intermediae trata de ir más allá del trabajo con la comunidad artística en sentido estricto e incorpora la perspectiva comunitaria como metodología y práctica, lo que abre la posibilidad de repensar la relación entre la institución y la ciudadanía. Bajo esta perspectiva, Intermediae se convierte en un ejemplo institucional desde donde analizar el trabajo explícito con comunidades locales, con contra-públicos y con audiencias expandidas, abordando abiertamente la pregunta por el giro social del arte, por su capacidad para la producción de conocimiento y por una práctica curatorial más allá del plano expositivo que camina hacia una propuesta de mediación crítica o curadoría expandida.

 

Situadas en el centro de la paradoja que hace de los centros de arte caballos de Troya de la gentrificación y las políticas neoliberales, la mediación crítica o la curadoría expandida pueden albergar un potencial estratégico, puesto que, en palabras de Alejandro Cevallos “no estamos en el lugar de la subversión, entendida como una lucha “desde afuera” de la institución, sino que estamos comprometidos con la exploración crítica y en profundidad de las mismas versiones dominantes que se producen y custodian, así como de las premisas desde las cuales se encarga la mediación” con el territorio. [Estamos] comprometidos con la apertura del espacio público institucional para la producción de ““contraversiones”, las versiones otras que empujan la imaginación sobre el devenir de la ciudad”[18]. Esta investigación, por tanto, pone la figura de la autorreflexibilidad en el centro con el fin de producir un conocimiento situado y una agencia crítica.

 

Marco teórico y estado de la cuestión

El ámbito teórico desde el que abordar este complejo conjunto de prácticas urbanas ciudadanas e institucionales debe ser lógicamente transdisciplinar. En primer lugar cabe señalar el aparato conceptual generado en torno a la nueva institucionalidad, una pregunta de largo alcance sobre los modelos institucionales que se habían construido la Europa de posguerra, ahora afectados por el nuevo escenario geopolítico y tecnológico. Esta pregunta, planteada en primer lugar desde las ciencias sociales, ha tenido una incidencia particular en las instituciones culturales en un contexto en el que el cuestionamiento del estado de bienestar, las crisis económicas y la transformación de los modelos de producción y distribución de conocimiento han hecho urgente la redefinición de las relaciones entre creadores, ciudadanos y estructuras[19]. Como parte de estos autores podemos destacar a Nina Möntmann (“The Rise and Fall of New Institutionalism: Perspectives on a Possible Future”), artículo que apareció en el libro de Gerald Raunig y Gene Rab, Art and Contemporary Critical Practice Reinventing Institutional Critique. Asimismo cabe señalar a Jonas Ekeberg y su artículo “Institutionalism Experiments Between Aesthetics and Activism”, y la reciente compilación (New) Institution(alism) de la revista On Curating, que contribuye a actualizar el compromiso crítico de este marco conceptual, abordando una serie de prácticas curatoriales, artísticas y educativas que, distribuidas geográficamente, desarrollaron ideas concretas para cambiar las instituciones de arte, sus mandatos y formatos como sitios de investigación y socialmente comprometidos como espacios de debate público[20].

 

En el ámbito español, podemos citar a Jorge Ribalta (“Experimentos para una nueva institucionalidad”); el segundo número de la revista Carta del Museo Reina Sofía, que hizo explícita la búsqueda de nuevas definiciones para lo institucional que pasan por una reinvención terminológica y conceptual, presente en los términos como instituciones de lo común, institución inacabada, institución anómala, institución monstruo o institución de movimiento; contribuciones como la de Marcelo Expósito (a través por ejemplo de espacios formativos como el seminario “Imaginación política: Reformulaciones del activismo artístico y la crítica institucional”) o el reciente artículo de Jaime Vindel (“Desplazamientos de la crítica: instituciones culturales y movimientos sociales entre finales de los noventa y la actualidad”), que relaciona el actual debate político sobre la toma de poder institucional por una parte de los movimientos sociales, con los vínculos previos establecidos entre instituciones cultures y dichos movimientos, situando como antecedentes la relación del MNCARS con la Fundación de los Comunes o la crónica nunca escrita del experimento entre las Agencias en el MACBA[21].

 

Cabe mencionar también la creación del European Institute for Progressive Cultural Policies (EIPCP)[22] (creado en 2001 y activo en la actualidad), origen de los proyectos ‘republicart’ (2002-05) y ‘transform’ (2005-08), que incorporan contribuciones teóricas y proyectos que investigan la posibilidad de nuevas políticas para el arte.  “Bajo títulos como ‘Precariat’, ‘Alternative Economics’, ‘Do you remember Institutional Critique?’ y ‘ Progressive Insitutions, Raunig y otros autores como Bors Buden, Brian Holmes, Marius Babias, Paolo Virno, y Simon Sheikh, desarrollaron una de institución arte política formada en la imagen de un emergente movimiento anticapitalista”[23]. Así como las contribuciones de teóricos y artistas como Chantal Mouffe, Gerald Raunig, Hito Steyerl o Andrea Fraser, Maria Lind, Alex Farquhanson o Claire Doherty, que han trabajado sobre sus límites y posibilidades esa posible nueva insitucionalidad^[24]. En el plano institucional este aparato nos sitúa junto en los debates de Rosseum en Malmö (con Charles Esche), el Kunstverein de Munich (con Maria Lind), el BAK en Utrecht (con Maria Hlavajova) o el MACBA en Barcelona (con Manolo Borja-Villel y Jorge Ribalta). También abordaremos la forma que ha tomado el debate, en el contexto local, en torno a las nuevas formas del procomún, desde la Fundación de los Comunes al Medialab Prado.

 

Otro campo teórico especialmente productivo ha sido el de la educación y las pedagogías críticas, que presentan un enfoque más feminista a la misma problemática. Como parte de este enfoque, es ineludible abordar críticamente el análisis giro educativo, articulado por Irit Rogoff en 2008, y actualizado en relación con la pregunta por la posibilidad de producción de conocimiento desde museos y universidades, y las estructuras de poder en que se inscriben[25]. En este ámbito, y desde una perspectiva crítica que aborda las contradicciones palpables entre el giro educativo y la práctica mediadora y educativa en museos, dialogaremos con autoras como Carmen Mörsch, Nora Landakamer y, en el contexto local Transductores, Javier Rodrigo y Antonio Collados[26]. Destacaremos los trabajos de Nora Sternfeld que se decantan explícitamente por una posición híbrida para enunciar su práctica entre la curadoría y la mediación.

Nora Sternfeld, en su texto “Sailing in search of radical education, don’t take the next turn”, sitúa Intermediae junto a una serie de “discursos y prácticas situadas entre la educación, el arte y la producción de conocimiento que definen su trabajo decididamente en conexión con estas luchas –por ejemplo en Berlín, Belgrado, Ginebra, Kassel, Ljubljana, Londres, Timisoara, Viena o Zurich- o Centre for Possible Studies (un proyecto comisariado por Janna Graham en la Serpentine Gallery, que se sitúa en la interfaz entre la institución, la mediación y las comunidades locales y el activismo)[27]. Siguiendo su argumento dialogaremos con la producción teórica y práctica de autores y proyectos como Claudia Hummel (Berlin), Rena Rädle (Belgrad), microsillons (Genf), Sandra Ortmann (Kassel), Radical Education Collective (Ljubljana), Ultra-red (London, Berlin, New York, LA), h.arta (Timisoara), Plattform Geschichtspolitik, Andrea Hubin, Karin Schneider and trafo.K (Wien).

Además de esto, un marco de apoyo especialmente relevante lo constituyen los estudios curatoriales. El texto ya citado de Olga Fernández López, sitúa Intermediae como uno de los casos de estudio del libro Curating Research (editado por Paul O’Neill). En este texto la autora se pregunta cómo Intermediae podría haber superado las limitaciones del nuevo institucionalismo y del giro educativo, analizando el centro desde metodologías situadas y formas de trabajar propias, entre las podemos señalar la práctica autorreflexiva que está en el centro del modelo curatorial de Intermediae. Cercano a este planteamiento está la idea de comisariado performativo (Maria Lind, Beatrice von Bismarck, Marion von Osten), así como el comisario como productor (John Roberts, Liam Gillick). En relación con una visión context-specific de la curadoría, buscaremos la colaboración y el diálogo con autoras del contexto local como Haizeia Barecenilla[28] que aborda el debate de lo público y lo común en la práctica curatorial.

 

En relación a cómo acontecen las luchas sociales en nuestro contexto, dialogaremos con colegas profesionales que, desde otros campos, como la antropología, la sociología o los estudios culturales, también están abordando el desborde cultural de la ciudad en torno al movimiento 15M (Alberto Corsín, Adolfo Estalella, Amador Fernández Savater o Luis Moreno Caballud), junto con los análisis en torno a la ciudad de Madrid y los movimientos sociales y extraparlamentarios en el contexto español (Observatorio Metropolitano). Colaboraremos con Isaac Marrero-Guillamón en la búsqueda de nuevos enfoques de investigación para la relación entre la ciudad y el ecosistema artístico y cultural[29]. Asimismo, desde un plano más general, buscaremos en otros enfoques materialistas nuevas herramientas para analizar la ciudad (Henry Lefevre, Michel de Certeau, Bruno Latour) y nuevas epistemologías desde el feminismo (Patty Lather o Amaya Pérez Orozco) y desde la teoría decolonial (Viveiros de Castro).

 

Metodología

Este proyecto describe en su formulación distintos planos entrecruzados: un lugar de trabajo, una ciudad, un contexto socio-político, y una hipótesis, planos que enmarcan mi propia práctica comisarial, mediadora y académica. Parto para ello de experiencias y situaciones vividas en el contexto de la precaria economía política del arte y la cultura de la ciudad de Madrid, y la producción material e inmaterial de sus infraestructuras. Estas experiencias están íntimamente ligadas a la acción colectiva en diferentes ámbitos, como el contexto activista y asambleario de la ciudad o la experimentación con la creación y el pensamiento en contextos institucionales. Investigar qué puede, y qué no, la práctica del comisariado y la mediación en la construcción de nuevas institucionalidades artísticas y culturales y hacerlo desde la reflexión sobre la propia práctica y en tiempo presente exige una metodología especialmente consciente de estos retos y problemáticas. Aquí querríamos mencionar la figura del testigo modesto de Donna Haraway para reformular la pregunta del siguiente modo ¿cómo ser testigos modestos de nuestra propia práctica?

 

Adoptar una aproximación situada, implica por tanto la investigación y el desarrollo de metodologías y formas de trabajar propias, entre las que se ha destacado ya la práctica autorreflexiva en el centro del modelo curatorial expandido que venimos practicando. Para este tesis, nos situamos en busca de nuevos conceptos, así como de un vocabulario con el que poder dialogar y poner palabras a este tipo de prácticas. Tanto los marcos teóricos como las formas de análisis con las que abordar este tipo de trabajo, están en proceso de construcción y definición, lo que nos llevará a cruzar fronteras disciplinares y buscar herramientas metodológicas en otros ámbitos, como la antropología o la sociología, donde la investigación cualitativa tiene un contexto desarrollado y larga tradición. Dichas herramientas se pondrán en diálogo con estrategias propias de la investigación en artes y humanidades, usando conceptos móviles para acercarnos a procesos que se encuentran en movimiento. El enfoque metodológico incorpora de manera crítica y consciente la problemática de la relación entre investigación, políticas y prácticas, lo que en nuestro caso se traduce en el desarrollo de una perspectiva de trabajo feminista y atravesada por la cultura libre, así como por las formas de trabajo colaborativas, que están en la base de los contextos sociales a los que nos acercamos.

 

Metodológicamente podemos distinguir varias dimensiones desde las que se desarrollará el curso de esta tesis. Se parte en primera instancia de la necesidad de crear un contexto colectivo que pueda ayudar a pensar en común, una cultura de investigación propia que articule un contexto desde el que abordar prácticas y proyectos que en el ámbito local, donde se ubica la investigación, no tienen a día de hoy una tradición académica donde inscribirse[30]. En este sentido, como proyecto de investigación se contextualiza como parte de una plataforma abierta de investigación y comisariado en construcción, con el título provisional de “Investigaciones indisciplinares”, desarrollada en colaboración con Olga Fernández López y Zoe Mediero. Se trata de un espacio de trabajo colaborativo que explora formas de producción de conocimiento entre el contexto académico y las nuevas formas de institucionalidad artística y cultural, abriendo un espacio en el que poner en diálogo las posibilidades y herramientas propias de la academia y la práctica curatorial. De esta manera, la pregunta por otra posible institucionalidad se extiende, preguntándose por su capacidad de afectación en relación con la propia ciudad, con la institución cultural donde opera, a través de su práctica comisarial y mediadora, y con la propia institución académica que acoge el proyecto de investigación.

 

Dentro del marco descrito, el desarrollo y resultado de esta investigación, pueden leerse en relación con otra propuesta de trabajo, con la que compone una investigación colaborativa. Ambas forman parte de una propuesta de co-investigación en la que se comparten herramientas metodológicas, un espacio común de trabajo y un contexto situado de reflexión y de partida: Intermediae como caso de estudio en relación con otras posibles formas de institucionalidad artística y cultural por imaginar. En el caso de la presente investigación el objeto de estudio y la hipótesis se construyen en torno a cómo esas posibles institucionalidades construyen una gobernanza distinta y cómo podrían éstas afectar a lo social. En el caso del trabajo propuesto por Zoe Mediero, co-investigadora del proyecto, el objeto de estudio y la hipótesis se construyen en torno a cómo esas posibles institucionalidades construyen conocimiento, y si, y si sí cómo, podría a partir de ahí definirse una institucionalidad que aprende, una institución amateur. Ambas propuestas pretenden mostrar una visión dialógica del proceso compartido, desde una voz propia y autónoma. Dicho trabajo será desarrollado en estrecha colaboración y diálogo con Olga Fernández López, directora de ambos proyectos de tesis. A lo largo el curso de la investigación se compartirán procesos de trabajo y puestas en común formales. Además hay antecedentes del trabajo en colaboración en los que pueden verse el origen del trabajo compartido.

 

Como parte del trabajo en común se compartirán contribuciones periódicas en la infraestructura digital Altermediae.org conceptualizada ad hoc para dicho proyecto de co-investigación[31], que funcionará como un cuaderno de campo digital, además de un espacio en el que compartir en abierto, información, materiales, lecturas, edición de entrevistas y publicaciones que puedan producirse a lo largo del proceso de investigación. Asimismo, se desatacan el uso de otras herramientas digitales con las que generar un entorno de trabajo abierto y común, como la herramienta Zotero que permite compartir listas bibliográficas, recomendar lecturas o referencias determinadas. Además se sistematizarán una serie de entrevistas y ejercicios de grupo con distintos participantes y agentes que forman parte del contexto institucional de Intermediae.

 

Como parte del trabajo específico desarrollado desde esta investigación, se utilizará como fuentes primarias en primera instancia el archivo Intermediae, el archivo 15M y otras formas de archivos urbanos, como los archivos del común en construcción desde la red de trabajo de la Fundación de los Comunes. Además se incorporará la búsqueda de formas de archivo no hegemónicas, siguiendo ejemplos como Mayday Rooms en Londres, que puedan ayudar a articular un relato local desde lo local. Se trabajará a partir de entrevistas personales y diálogos en grupo, con participantes en el proyecto institucional Intermediae, desde las que tratar de dimensionar la visión institucional y la institución por imaginar en diálogo con dichos agentes y sus proyectos desarrollados. Asimismo, se articulará un programa de entrevistas, con agentes implicados en distintos espacios de la ciudad, junto con agentes clave que en contextos institucionales locales han desarrollado prácticas de colaboración entre contextos autogestionados e instituciones culturales. Se creará un espacio de trabajo desde otros formatos dialógicos, propios del ámbito del curadoría y la mediación, para investigar sobre estas infraestructuras sociales alternativas, a través de debates, encuentros entre agentes diversos, entre los que se encontrarán además agentes implicados en el actual movimiento municipalista en relación con la cultura.

 

Se plantea también un recorrido, en forma de entrevistas, encuentros y estancias por definir, en diferentes espacios en los que se esté poniendo en juego este tipo de relación entre contextos institucionales, prácticas autogestionadas y movimientos, que pueda contribuir desde una perspectiva comparativa a esa cartografía en desarrollo objetivo de la propia investigación. El itinerario se compondrá a través de espacios institucionales o espacios representativos de institucionalidades alternativas, que tienen unas prácticas afines y compartidas pero multisituadas geográficamente. Estos espacios podrían llegar a componer un proyecto político distribuido, que opera en red bajo la presión de las políticas neoliberales globales, en relación con una idea de la justicia social, junto con la crítica y la transformación institucional. Entre ellas destacamos el diálogo con Janna Graham, que incorpora esta perspectiva de trabajo en el proyecto del Para-sites y en el desarrollo de su práctica como project curator en el Center for Possibles Studies, situado en Edward Road, Londres[32], y la conversación con la red de trabajo Another Road Maps[33].

 

Desde la plataforma previamente citada, “Investigaciones indisciplinares –título provisional-“, se articulará un programa de seminarios de trabajo abiertos a otros agentes interesados, en los que entrar en diálogo con investigadores y agentes clave en diferentes materias relacionadas con el contexto de trabajo de las investigaciones que se integran y puedan integrarse en un futuro. Estos seminarios estarán también dedicados a la puesta en común formas de investigación colaborativa, claves de trabajo en el ámbito de la curadoría, la mediación y la investigación, y perspectivas de análisis y prácticas en la construcción de otras formas de institucionalidad artística y cultural. Asimismo, se mantendrán una serie de sesiones de trabajo compartidas mensuales en las que poner en común lecturas compartidas, a través de la práctica habitual de un grupo de lectura, así como el desarrollo y avances de las investigaciones en curso. Será un espacio de trabajo en el que analizar los límites y retos a los que nos enfrentamos así como articular feedback a nuestros procesos de trabajo.

 

Entre los objetivos de este enfoque metodológico está el hacernos eco de las prácticas colaborativas que están en la base de los procesos que tratamos de estudiar y que, de alguna manera, deberían afectar a las propias prácticas investigadoras desde las que se abordan. Como hemos descrito anteriormente desde este equipo de trabajo: “La academia es el espacio institucionalizado de la investigación formal y comparte con el del arte el haber visto profundamente desafiado su papel en la economía de producción de conocimiento. Nos parece, por tanto, especialmente urgente definir la forma en que el contexto académico puede ponerse en diálogo con el de la producción cultural. En este sentido, nos preguntamos: Si los ámbitos artístico y comisarial se han convertido en uno de los lugares principales donde se piensa y practica la experimentación de nuevos modelos sociales, ¿no deberán estos nuevos modelos y las prácticas colaborativas, tanto sociales como artísticas, afectar también la forma en que éstos se han venido estudiando? Es decir, ¿no deberíamos empezar a entender éstas no como un mero objeto de estudio, del que la academia se distancia, sino como un verdadero agente transformador? En el campo de las Humanidades, ¿no deberían dejar de seguir siendo una excepción las prácticas de investigación colaborativas? (…) Esto supone asumir el reto de trabajar en ello desde las estructuras de las que se participa y de compartir con otros dicha producción mientras se hace”[34].

 

Relevancia de la investigación

En el momento en que escribo este proyecto es casi 15 de mayo otra vez. Quedan apenas dos semanas para las elecciones municipales, y parece abrirse una tesitura política que enuncia la posibilidad de toma de poder por una parte de los movimientos sociales, si no en esta ciudad, aquí y ahora, al menos en el horizonte de lo posible. Esta pregunta por el autogobierno de las comunidades locales, abierta por los movimientos municipalistas y los nuevos partidos políticos, afecta directamente a las nuevas formas de articulación entre el arte crítico y una esfera pública de oposición que, aunque antes ya venían manifestando una clara voluntad contra-hegemónica, ahora necesitan dotarse de un nuevo marco de pensamiento y acción. La agenda de los próximos años parece marcada por la necesidad de plantear una alternativa de poder que conduzca a la implantación paulatina de las demandas de radicalización democrática en los planos político, económico, social y cultural, impulsadas por la esfera pública de oposición.

 

La situación actual es urgente y reclama formas de colaboración que replanteen los criterios de separación de funciones con las que la modernidad habría construido sus instituciones. Es necesario dejar de pensar en sistemas estancos y configurar visiones más complejas que den cuenta del universo de relaciones que constituyen la producción cultural de la ciudad, desplazando nuestra mirada más allá de los límites que la contienen. Una modernidad que, como apunta Bruno Latour, produjo otros movimientos generando mediaciones, enredos y ensamblajes entre aquellas mismas esferas que pretendía separar[35]. Siguiendo a Latour, este proyecto pretende enfocar lo político como un fenómeno socio-material, basado en el ensamblaje y la colaboración de actores humanos y no-humanos, en el que objetos, infraestructuras y otros dispositivos pueden jugar un papel fundamental, abordando simétricamente el entramado de dimensiones afectivas y materiales y abriendo nuevas posibilidades para pensar la ciudad desde la búsqueda de otras ecologías y cosmopolíticas urbanas[36].

 

Junto a la necesidad de repensar las instituciones, también las culturales, planteada por Bruno Latour, entendemos que el derecho a la ciudad de Henry Lefebvre, recuperado hoy en día por multitud de autores para pensar en las transformaciones y conflictos urbanos actuales, y actualizado por el geógrafo David Harvey (Ciudades Rebeldes, 2012), supone una reclamación que puede ser expandida hacia el derecho a la cultura que, frente a una noción mercantilista de la cultura como un recurso o como una industria y al desarrollo de las “ciudades marca”, pone en el centro la noción de democracia cultural y el derecho a producir prácticas culturales por parte de la ciudadanía. Este imaginar otras instituciones culturales, cómo afectarlas desde los deseos colectivos y, sobre todo cómo relacionarlas con las preocupaciones locales y la vida política de la ciudad es un debate que adquiere ahora nuevas dimensiones y sentidos en el contexto de una ciudad en la que, como veíamos, la vitalidad del debate institucional con el respecto a la relación con los ciudadanos, ecosistema, movimientos sociales, es indiscutible. En este sentido, la relevancia de nuestra investigación estaría ligada al concepto de la urgencia del territorio, que es “la demanda que emerge del contexto social y nos pide posicionarnos desde nuestro lugar de trabajo”[37] e invita a preguntarnos ¿para qué hacemos lo que hacemos?

 

A partir de este enfoque, se desglosan una serie de preguntas que forman parte de la hipótesis de partida en torno a las posibilidades de transformación de las instituciones artísticas y culturales, en su relación con la cultura ciudadana de base. Entre otras, podemos señalar:

¿Ha tenido la pregunta por la transformación institucional, articulada explícitamente en el contexto de las luchas sociales que acontecen en la ciudad, una práctica especialmente relevante en los márgenes de trabajo y experimentación de las instituciones culturales?¿Permite este contexto resituar la función de la cultura y sus instituciones en la gobernanza urbana? ¿Hasta dónde podría expandirse la idea de la institución como herramienta o lugar en que testear procesos orientados hacia una cultura más pública, democrática y horizontal? ¿Están estos espacios bottom-up de la ciudad reinventando lo social desde lo cultural? ¿Hasta dónde puede forzarse la pregunta por la función social del arte? ¿Puede pensarse el arte como una herramienta de transformación social? ¿Cómo podemos abordar el estudio y creación de nuevas formas de institucionalidad artística y cultural? ¿Desde qué prácticas y posicionamientos? ¿Es posible situarse como un testigo modesto de nuestros propios proyectos y ver hasta qué punto son transformadores? ¿Qué tipo de conocimiento se produce en los ámbitos tanto del comisariado como de la investigación social?

 

Progreso del trabajo

La presente tesis articula una investigación basada en la práctica vinculada a mi participación en el proyecto institucional Intermediae y el modelo curatorial basado en la reflexión, investigación y colaboración que hemos desarrollado colectivamente, llevándonos a experimentar con distintos formatos que atienden a las especificidades de cada colectivo con el que hemos trabajado. Experimentación ha significado tratar de ir más allá de los modelos convencionales de trabajo y presentación; pensar con y aprender de los diferentes agentes y movimientos de base con los que colaboramos; contribuir a desarrollar estos “experimentos”, pero también reflexionar sobre ellos. En este sentido hay algunos textos, prácticas y proyectos clave que podríamos considerar parte del progreso de dicho trabajo. Entre ellas podríamos citar la edición de la entrevista sobre prácticas institucionales elaborada durante el año 2010[38], y muy especialmente la articulación del espacio de co-investigación: Políticas de investigación comunes situados.

 

Mi trabajo se ha centrado en la exploración de modelos emergentes de mediación, investigación y comisariado, que articulan otras políticas de relación con comunidades locales desde una perspectiva artística y cultural, a la vez que establecen nuevas formas de colaboración con entre ámbitos institucionales y contextos no institucionalizados, vinculados a movimientos sociales organizados y no organizados. Así como de estudiar la práctica mediadora y comisarial como metodología de trabajo en la producción de otras formas de institucionalidad artística y cultural pública. Con la intención de abordar esta problemáticas y aprender a utilizar para ello herramientas propias de la academia me matriculé en el Máster en Historia del Arte Contemporáneo y Cultura Visual, de la Universidad Autónoma de Madrid, donde escribí mi proyecto fin de master, Poéticas de lo múltiple. Una investigación política desde la práctica curatorial en contexto (2012), todo ello con la tutoría y el acompañamiento de Olga Fernández López. En relación con este trabajo publiqué unos meses después el texto Curadorías jaguares, poéticas de lo múltiple. Una mirada decolonial en la producción de la nueva institucionalidad pública, junto a Zoe Mediero, a partir de una entrevista a Gerardo Tudurí del colectivo Cine sin Autor[39].

 

Posteriormente empecé a trabajar en la conceptualización y el desarrollo de la plataforma abierta de investigación anteriormente citada, en colaboración con Olga Fernández López y Zoe Mediero. Un espacio de trabajo colaborativo que explora formas de producción de conocimiento entre el contexto académico y las nuevas formas de institucionalidad artística y cultural, abriendo un espacio en el que poner en diálogo las posibilidades y herramientas propias de la académica y la práctica curatorial, donde contextualizar mi proyecto de tesis. Desde este espacio de trabajo recientemente hemos trabajado y presentando trabajos en relación con dicha temática en los siguientes congresos y simposios: “Curating as methodology. The co-production of public space in Madrid” en el Simposio Curatorial Practices Reframed: Politics and Pedagogy in Curating Contemporary Art (1-2 Nov 2013), Dep of Arts of European University (Nicosia, Chipre); “Hundred methodologies. The construction of another institutionality from the standpoint of cultural production” en el Simposio STS turns aesthetic. Architecture, design and the fine arts as epistemic cultures in the making (7-8 Nov 2013), ETH Zurich y ZHdK Zurich University of the Arts; “One Hundred methodologies to de-cast the institution”, en el Simposio Transmissions and entanglements: Critical conversations about crafting, performing and making (11-12 Jun 2014), Dep Visual Sociology, Goldsmiths University of London. También se ha materializado como nuestra contribución a “Transductores 3. Prácticas artísticas en contexto[40]. Además he abordado el análisis sobre el proyecto en desarrollo Citykitchen, que forma parte de esta propuesta de investigación, en comunicaciones como “Lo común en tensión”, en 2013, y presento próximamente “Utensilios y recetas para pensar nuevas institucionalidades urbanas”, donde nos aproximamos a las nuevas formas de institucionalidad híbrida y abierta que en los últimos años habrían emergido en la ciudad en un proceso de reinvención de la gobernanza urbana, junto con Aurora Adalid y Zoe Mediero. Recientemente también, presenté la comunicación “Citykitchen como un experimento urbano sobre gobernanzas híbridas” en el congreso del Conama 2014[41].

 

En relación al trabajo a desarrollar durante el desarrollo de esta tesis, nos centraremos en el análisis de tres proyectos, cada uno representa un enfoque y problemática diferente. Como parte de la perspectiva de trabajo de Intermediae en relación con la ciudad, desde 2011 hemos empezado a desarrollar diferentes proyectos con los que explorar el entramado urbano descrito e investigar nuevas maneras de entender las relaciones entre los espacios, los ciudadanos y las instituciones. En esta línea, por ejemplo, abordaremos el proyecto Citykitchen, que desarrollamos en colaboración con los colectivos Basurama, Zuloark, y la plataforma de La Mesa ciudadana, actualmente en desarrollo. Citykitchen, en concreto, pretende abrir un espacio de trabajo sobre el tipo de conocimiento, herramientas que se están produciendo en la ciudad, sobre los modelos de gobernanza con los que se está experimentando, y por cómo pueden  estas experiencias incorporarse en los procesos formales de toma de decisión de la esfera pública. Además abordaremos la intervención en los distintos “Paisajes urbanos de la ciudad” que se sirven de esta noción como herramienta de negociación entre contextos vecinales la propia administración sobre las formas legales o no, posibles o no de intervenir en el espacio público, reconociendo el derecho de todas las personas de intervenir en su paisaje cotidiano. Como parte de este trabajo llevamos a cabo una serie de intervenciones culturales enfocadas a la participación en el espacio público, en colaboración colectivos de pensamiento e intervención crítica urbana, y agentes del tejido social y cultural de los barrios en los que actuamos. A este análisis se añadirá un tercer ejemplo aún por definir.

 

 

 

[1] ZULOARK: “En lugar de dos pon tres… “Exceso de capacidad” en el ecosistema de la producción cultural madrileña y sus instituciones”, Arquine, 66. México, 2013, pp. 112-117. CORSÍN JIMÉNEZ, A.: “The right to infrastructure: a prototype for open-source urbanism”, Environment and Planning D: Society and Space, 32(2), 2014, pp. 342-362. Disponible en http://digital.csic.es/bitstream/10261/85115/1/right_infrastructure_finalpreprint.pdf. Última consulta 10/05/2015.

[2] Ver http://estaesunaplaza.blogspot.com.es/2008/12/hablando-de-la-plaza.html. Última consulta 10/05/2015.

[3] ESTALELLA, A.: Un experimento urbano de mesa, 2014. Disponible en http://citykitchen.es/un-experimento-urbano-de-mesa/. Última consulta 10/05/2015.

[4] Ver BASURAMA: “Manifiesto abierto por los Espacios Urbanos de Madrid”, en Ciudad Viva (blog), 2015. Disponible en http://www.laciudadviva.org/blogs/?p=27961. Última consulta 10/05/2015.

Merece la pena señalar casos como el de La Casa Grande del Pumarejo, considerada como epicentro de lucha social, cultural patrimonial y etnológica en Sevilla, Esto no es un solar en Zaragoza, Solar de la Corona en Valencia, Can Batlló en Barcelona, Sk8+U en Girona, Zawp en Bilbao, o Lafabrika Detodalavida_Conceptuarte en Badajoz, entre otros.

[5] Podemos distinguir en ella agentes y colectivos independientes que movilizan la retórica de la creación, como Vaciador 34, espacios polivalentes autogestionados, como el Patio Maravillas, espacios liberados como el CSO La Morada, proyectos en colaboración entre instituciones y contextos independientes o autogestionados, como La Tabacalera de Lavapiés, y nuevos espacios promovidos por los vecinos o desarrollados desde la ciudadanía, como El Campo de Cebada o Esta es una plaza, por mencionar algunos de ellos. Otros proyectos que se distribuyen más allá del centro en otros barrios de la ciudad, como el proyecto de Autobarrios en San Cristóbal, el Barrio es nuestro de TXP en Palomeras Bajas, o la reciente creación de la Plataforma EVA, que reclama un espacio cultural cedido a los vecinos para el barrio de Arganzuela.

[6] Ver http://comunidad.medialab-prado.es/es/esta-es-una-plaza/post/la-custodia-urbana-de-los-bienes-comunes. Última consulta 10/05/2015.

[7] Ver https://redhuertosurbanosmadrid.wordpress.com/. Última consulta 10/05/2015.

[8] Ver http://citykitchen.es/. Última consulta 10/05/2015.

[9] A esta noción de políticas de cuidado de la propia ciudad en relación con los bienes comunes se dedicó la última edición del Festival Zemos98: Caring for the City: Reclaim the Commons. Ver http://17festival.zemos98.org/Caring-for-the-City-Reclaim-the. Última consulta 10/05/2015.

[10] CARRILLO, J.: Las nuevas fábricas de la cultura: los lugares de la creación y la producción cultural en la España contemporánea, 2008. Disponible en http://medialab-prado.es/mmedia/689. Última consulta 10/05/2015.

[11] FERNÁNDEZ LÓPEZ, O.: “What if an institution was curated? Intermediae as an institutional hypothesis”, en O’NEILL, P. and WILSON, M. (eds.): Curating and/as Research. London, Open Books, 2015, p. 97.

[12] Entre ellos podemos destacar Future Archive, un proyecto de Manuela Zechner y Valeria Graciano, en residencia en Intermediae en 2009, cuyo tema de investigación se centró en cómo imaginamos y qué deseamos de las instituciones públicas del futuro. Los tres focos de reflexión giraron en torno a cómo se articularía su comunicación y visibilidad, cuáles y cómo se definirían las formas de colaboración y de qué manera podría construirse el compromiso con aquellos que forman parte de la red de trabajo de la institución. Durante diez días y a través de la metodología de investigación y de proyección se mantuvieron conversaciones con aquellas personas vinculadas a Intermediæ de forma directa o indirecta: colaboradores, artistas, públicos, asociaciones, colectivos, el equipo del propio centro, otros espacios de creación, etc., tratándose de recoger, descifrar y entender los deseos y relaciones puestas en juego por todas las partes. Ver http://intermediae.es/project/procesos_de_archivo/page/future_archive. Última consulta 10/05/2015. O más recientemente, el proyecto Greenvía, que desarrollamos junto con el VIC y Colaborabora, y reunió a más de 40 iniciativas ciudadanas, articulando un espacio de trabajo sobre el tipo de conocimiento y herramientas que se están produciendo en la ciudad desde estas prácticas, y sobre cómo pueden estas experiencias incorporarse en los procesos formales de toma de decisión de la esfera pública. Ver http://intermediae.es/project/intermediae/blog/greenvia_transferencias_de_innovacion_social_al_espacio_publico. Última consulta 10/05/2015.

[13] FERNÁNDEZ LÓPEZ, op. cit., p. 99.

[14] LANDKAMMER, N.: “Educación en museo y centro de arte como práctica colaborativa”, en CEVALLOS, A., MACAROFF, A, y RODRIGO, J. (eds.): Contradecirse a una misma. Museos y mediación educativa crítica. Experiencias y reflexiones desde las educadoras de la Documenta 12. Quito, Fundación Museos de la ciudad, 2015, p. 30.

[15] En este sentido, podríamos presentar muchos proyectos, desde los primeros experimentos que desarrollamos dedicados al entorno urbano más inmediato como Todo Sobre mi Barrio, un proyecto de Laboratorio Urbano y Algomas desarrollado en el año 2007; el desarrollo de Semilla Boombox implementado en Villaverde en 2012 con la Asociación Semilla; o más recientemente la colaboración entre de Cine sin Autor y la plataforma Carabancheleando para filmar una película en el Barrio de Caño Roto, actualmente en desarrollo.

[16] Cuyos antecedentes no podemos dejar de situar en Atenas y las primaveras árabes, y sus repercusiones con el Occupy Global y otras expresiones que esta indignación adoptaría en ciudades como Londres, Estambul, Nueva York o, más recientemente, Hong Kong.

[17] En esta línea, por ejemplo, podemos destacar la colaboración en la creación y puesta en marcha del Instituto Do it Your Self, en el que hemos colaborado con el colectivo Todo por la praxis. La intervención en los distintos “Paisajes urbanos de la ciudad”, que articula una colaboración con el tejido social activo de cada distrito, utilizando esta noción (paisaje urbano) como herramienta de negociación entre contextos vecinales y la propia parte de la administración municipal impulsora de esta propuesta (de carácter anual que cuanta ya con tres ediciones) sobre las formas legales o no, posibles o no, de intervenir en el espacio público, reconociendo el derecho de todas las personas de intervenir en su paisaje cotidiano. O el proyecto Citykitchen, que desarrollamos en colaboración con los colectivos Basurama, Zuloark, y la plataforma de La Mesa ciudadana, actualmente en desarrollo.

[18] CEVALLOS, A. y MACAROFF, A: “Introducción”, en CEVALLOS, A. y MACAROFF, A y RODRIGO, J. (eds.): Contradecirse a una misma. Museos y mediación educativa crítica. Experiencias y reflexiones desde las educadoras de la Documenta 12. Quito, Fundación Museos de la ciudad, 2015, p. 4.

[19] Este análisis del marco teórico del nuevo institucionalismo parte de un trabajo compartido y realizado en colaboración con Olga Fernández López y Zoe Mediero en varias ponencias (ver Progreso del trabajo).

[20] MÖNTMANN, N.: “The Rise and Fall of New Institutionalism: Perspectives on a Possible Future” en RAUNIG, G. and RAY, G. (eds.): Art and Contemporary Critical Practice Reinventing Institutional Critique. London, MayFlyBooks, 2009; EKEBERG, J.: “Institutionalism Experiments Between Aesthetics and Activism” en HEBERT, S. y SZEFER KARLSEN, A. (eds.), Self-organised. London, Open Editions, 2013, Pp. 51-61; (New) Institution(alism), On curating, Issue 21, January 2014. Accesible en http://www.on-curating.org/index.php/issue-21.html#.VVJZ6WYai1l. Última consulta 10/05/2015.

[21] RIBALTA, J.: Experimentos para una nueva institucionalidad, 2008. Disponible en http://www.macba.cat/PDFs/jorge_ribalta_colleccio_cas.pdf. Última consulta 10/10/2015; Carta, nº 2, primavera-verano, 2001, Madrid, Museo Reina Sofía. Accesible en http://www.museoreinasofia.es/sites/default/files/revista/pdf/carta2.pdf. Última consulta 10/05/2015; VINDEL, J.: “Desplazamientos de la crítica: instituciones culturales y movimientos sociales entre finales de los noventa y la actualidad” en Desacuerdos. Sobre arte, políticas y esfera pública en el Estado español, nº 8. Centro José Guerrero – Diputación de Granada, Museu d´Art Contemporani de Barcelona, Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía y Universidad Internacional de Andalucía – UNIA arteypensamiento. 2014, pp. 290-319. Accesible en http://www.museoreinasofia.es/publicaciones/desacuerdos#numero-8. Última consulta 10/05/2015.

[22] Ver http://eipcp.net/. Última consulta 10/05/2015.

[23] EKEBERG, op. cit., p. 58.

[24] FARQUHARSON, A.: “Bureaux de change”, en Frieze, nº 101, September 2006; DOHERTY, C.: “The institution is dead! Long Live the institution! Contemporary Art adn New Institutionalism”, en engage rewiew, Issue 15, Summer 2004; RAUNIG, G.: “Prácticas instituyentes. Fugarse, instituir, transformar”, en Transversal – Multilingual Web Journal, nº 1, 2006. Disponible en http://eipcp.net/transversal/0106/raunig/es. Última consulta 10/05/2015.

[25] ROGOFF, I.: “Turning” en e-flux journal, nº 0, 2008. Accesible en http://www.eflux.com/journal/turning/. Última consulta 10/05/2015; ROGOFF, I.: “Free”, en e-flux

journal, nº 14, 2010. Accesible en http://www.eflux.com/journal/free/. Última consulta 10/05/2015.

[26] MOERSCH, C.: “Contradecirse a una misma. La educación en museos y exposiciones como práctica crítica”, en CEVALLOS, A. y MACAROFF, A y RODRIGO, J. (eds.): Contradecirse a una misma. Museos y mediación educativa crítica. Experiencias y reflexiones desde las educadoras de la Documenta 12. Quito, Fundación Museos de la ciudad, 2015, pp. 10-21. COLLADOS, A. y RODRIGO, J.: “Entretejiendo aprendizajes entre el arte, los contextos y las pedagogías colectivas”, en Transductores 3. Modos de trabajo artístico en contexto. Itinerarios, útiles y estrategias. Granada, Centro de Arte José Guerrero-Diputación de Granada, 2015, pp. 21-26.

[27] STERNFELD, N.: “Sailing in search of radical education, don’t take the next turn”, en Cumma Papers, 10. Helsinki, Department of Art Aalto University Helsinki, 2014. Disponible en https://cummastudies.files.wordpress.com/2013/08/cumma-papers-10.pdf. Última consulta 10/05/2015.

[28] BARCENILLA, H.: “Going public: telling it as it is”, en CHECCHIA, V & JAREUNPOON, J.M. Not (yet) a manifesto. Notes on research and politics in curatorial practice. Italy, Vessel Art Projects, 2012, pp. 18- 23.

[29] Alberto Corsín Jímenez y Adolfo Estalella están comprometidos con una investigación en desarrollo sobre la ciudad y sus desbordes en torno la movimiento 15M, sus investigaciones y papers están accesibles en http://www.prototyping.es/research. Última consulta 10/05/2015. Amador Fernández Saváter publica habitualmente sobre el contexto activista de la ciudad de Madrid, del que forma parte activa, entre sus contribuciones cabe destacar el blog http://blogs.publico.es/fueradelugar/. Última consulta 10/05/2015. Luis Moreno Caballud comparte el proceso de una investigación sobre democratización cultural durante los años de la presente crisis neoliberal en el estado español, centrándose especialmente en el movimiento 15M y en diálogo con Occupy Wall Street, en https://culturasdecualquiera.wordpress.com. Última consulta 10/05/2015. Recientemente ha finalizado el libro “Culturas de cualquiera Estudios sobre democratización cultural en la crisis del neoliberalismo español”, de próxima publicación. Última consulta 10/05/2015. Con el antropólogo Isaac Marrero-Guillamón, que investiga activamente sobre la transformación de la ciudad postindustrial y la articulación de nuevas formas colectivas de acción, así como sobre políticas de representación y metodologías de experimentales de investigación, mantengo y mantendré una estrecha colaboración, en el ámbito de la teoría y la praxis, para la conceptualización de la mediación y la curadoría como metodologías de acción e investigación para la ciudad. Sus publicaciones pueden encontrarse en http://goldsmiths.academia.edu/IsaacMarreroGuillamon. Última consulta 10/05/2015.

[30] Aunque la investigación militante podría definirse como el lugar natural de este tipo de enfoques metodológicos, nos interesa articular un espacio de trabajo híbrido que mantenga una relación activa con la universidad y desde la autonomía propia de los procesos de investigación implicados en contextos sociales y activistas.

[31] Altermediae es una identidad colectiva, nómada y mutante, que solo responde al momento actual, un espacio intermedio entre nuestras prácticas institucionales y nuestras investigaciones personales. Se acompañará de la cuenta en twitter @altermediae, como un intento de estudiar describir y poner en juego, la red de cuerpos, relaciones, saberes e infraestructuras invisibles o inmateriales con las que damos vida y sostenemos las instituciones. La infraestructura digital altermediae.org ha sido creada por Zoe Mediero en colaboración con Kune.cc y funciona como en un espacio dedicado a la investigación colaborativa y libre, cuyo diseño se basa en Kune. Ambas herramientas nacen con el objetivo de dar un lugar y compartir las diversas investigaciones que llevamos a cabo en el contexto de o en relación con Intermediae, como tal será un espacio de trabajo abierto a otros.

[32] Ver http://www.newmuseum.org/blog/view/para-sites-like-us-what-is-this-para-sitic-tendency. Última consulta 10/05/2015. Interview with GRAHAM, J., by FORSMAN, E., SUNI, N., TAIPALE, U., TIITS, H., VÄHÄSÖYRINKI, A., y ZAMUDIO, E., “Para-site – following in the footsteps of Freire”, en Cumma Papers, 12. Helsinki, Department of Art Aalto University Helsinki, 2014. Disponible en https://cummastudies.files.wordpress.com/2015/04/cumma-papers-121.pdf. Última consulta 10/05/2015.

[33] Ver http://another.zhdk.ch/. Última consulta 10/05/2015.

[34] FERNÁNDEZ LÓPEZ, KLETT y MEDIERO, op. cit., p. 234.

[35] LATOUR, B.: Nunca fuimos modernos. Ensayo de antropología simétrica. Buenos Aires, Siglo XXI, 2007.

[36] La ciudad y las políticas urbanas han sido recientemente abordadas desde los estudios la ANT post-ANT. En este contexto, la noción de ‘urban assemblages’ ha sido mobilizada para retar la separación a priori de usuarios, productores, infraestructuras en el espacio público, y para establecer una pregunta exploratoria por las formas en las cuales los actors humanos o no humanos “hacen” juntos la ciudad, en este sentido podemos destacar como fuente la compilación de FARÍAS, I. & Thomas BENDER, T.: Urban Assemblages. How Actor-Network Theory Changes Urban Studies. Questioning Cities. London/New York, 2009. Desde una perspectiva del ensamblage, la controversia en torno a lo urbano no puede ser reducida a intereses únicamente humanos, abriendo espacio para una cosmopolíticas orientadas por los objetos (object-oriented ‘cosmopolitics’), en este sentido próximamente será publicada la compilación BLOK, A. & FARÍAS, I. (eds.): Urban Cosmopolitics. Agencements, Assemblies, Atmospheres. Puede destacarse la contribución de LATOUR, B.: “Whose cosmos, which cosmopolitics?: Comments on the Peace Terms of Ulrich Beck”, en Common Knowledge Fall, 10(3), 2004, pp. 450-462 Disponible en http://commonknowledge.dukejournals.org/content/10/3/450.full.pdf+html . Última consulta 10/05/2015.

[37] CEVALLOS, A. y MACAROFF, A., op. cit, p. 3.

[38] MARZOCCHINI, T., entrevista con KLETT, A. Intermediæ: un laboratorio, no un museo. Algunas cuestiones sobre las prácticas en Intermediae. Archivo de Intermediae. 2007.

[39] KLETT, A., MEDIERO, Z. Y TUDURÍ, G.: “Curadorías jaguares, poéticas de lo múltiple. Una mirada decolonial en la producción de la nueva institucionalidad pública”, en Teknocultura, volúmen 10, nº 1, 2013 http://teknokultura.net/index.php/tk/article/view/94. Última consulta 10/05/2015.

[40] FERNÁNDEZ LÓPEZ, O., KLETT, A. y MEDIERO, Z.: “En medio de las cosas. Investigación indisciplinar, entre el espacio artístico, la academia y la ciudad”, en COLLADOS, A. y RODRIGO, J. (eds.):Transductores 3. Modos de trabajo artístico en contexto. Itinerarios, útiles y estrategias. Granada, Centro de Arte José Guerrero-Diputación de Granada, 2015, pp. 223-234.

[41] Comunicación de Aurora Adalid, Azucena Klett y Zoe Mediero “Lo común en tensión” en el III Encuentro de la red esCTS – ¿Y si no me lo creo? Deshaciendo y rehaciendo mundos comunes (2013). Comunicación de Aurora Adalid, Azucena Klett y Zoe Mediero “Utensilios y recetas para pensar nuevas institucionalidades urbanas” en el V Encuentro de la red esCTS – Me lo dices o te lo cuento (2015). Desbordes de los límites de la academia. Comunicación Azucena Klett “Cityktichen como experimento urbano sobre gobernanzas híbridas en el Congreso del Conama 2014 (2014), audio disponible aquí: http://www.conama2014.conama.org/web/generico.php?idpaginas=&lang=es&menu=261&id=167&op=view&from=view_personas. Última consulta 10/05/2015.